En una audiencia pública y luego de tres años y medio de trabajo, se presentó el Plan de Manejo de la Reserva de Usos Múltiples Humedales e Islas de Victoria. La convocatoria se llevó adelante como parte de las instancias previstas junto con la reglamentación de la legislación que crea como área natural protegida a la zona de humedales ubicadas dentro del ejido de la ciudad de Victoria y que forman parte del Delta del Paraná. En la reunión, y luego en un comunicado, la Sociedad Rural, la Federación de Asociaciones Rurales y la entidad que agrupa a los hacendados de las islas plantearon objeciones a las normas de protección que prohíben el uso de agrotóxicos y construcción de terraplenes en los humedales. Se “impide el desarrollo y el empleo de técnicas modernas”, dicen. Por su parte, en diálogo con ERA Verde, el director de Áreas Naturales de Entre Ríos, Alfredo Berduc, destacó el proceso participativo del plan y apuntó que debe primar el bien común por encima de los intereses sectoriales.

El pasado 22 de junio, en el Cine Teatro Victoria, tuvo lugar un encuentro convocado por el Comité de Promoción del Ordenamiento Territorial y Gestión de la Reserva de Usos Múltiples (RUM) Humedales e Islas de Victoria en vista a presentar el Plan de Manejo del área natural ubicada en el Delta y la segunda más grande en la provincia por su extensión: 464.000 hectáreas.

 

Fue una reunión “caldeada”, coincidieron distintos actores que participaron en la instancia abierta a toda la comunidad, con el objeto de validar públicamente, así como escuchar sugerencias y planteos al documento preliminar que regirá normativamente sobre la RUM.

 

Como se recordará, el área Humedales e Islas de Victoria fue reconocida como reserva protegida por la ordenanza municipal Nº 2.185 de 2003 y la Ley provincial Nº 10.671 de 2019 que la incorpora al Sistema Provincial de Áreas Naturales Protegidas con una modalidad de manejo de usos múltiples. De este modo, las “autoridades municipales y provinciales administran de manera conjunta este territorio y tienen competencias concurrentes”, se observó.

 

Es así que, teniendo este marco legal, a fines de 2019 se comenzaron a generar los espacios participativos para lograr la confección de un plan de manejo para la zona, luego que el gobernador Gustavo Bordet reglamentara la ley, refirió a ERA Verde el responsable de Áreas Naturales provincial, Alfredo Berduc. El funcionario planteó que el proceso con el cual se arribó al Plan de Manejo cuenta con un largo derrotero “con muchas reuniones y varios recorridos por el territorio, análisis de información previa, talleres participativos con especialistas en lo social, ambiental y productiva. Han participado gente de Hidráulica, Recursos Naturales, Fiscalización, Policía, Prefectura, INTA, Facultades, Conicet, Parques Nacionales, Ambiente, Tierras Fiscales, Salud, Educación y el sector productivo y político, municipio y la cámara inmobiliaria. El municipio con todas sus áreas y el Concejo Deliberante con todas las bancadas. Y, por supuesto, el trabajó de Fundación Humedales”, reconoció sobre el documento que recoge “toda la información y las propuestas que se fueron presentando, validando y madurando, los mapas, y el decreto reglamentario 211/23 de la ley, que sentó las bases generales para el manejo de esta reserva”.

Reglamentan la Ley del Área Natural Protegida Islas de Victoria

Berduc comentó que lo que se presentó es un modelo que “define cuestiones más puntuales donde, por sectores, se encuentran determinadas regulaciones”. Explicó que como “reserva de usos múltiples” se establecen los criterios los sectores “donde se puede producir con determinadas características. O también en dónde se habilita para la pesca o para el turismo y la ocupación humana. Es un documento que tiene una complejidad de construcción, y esta complejidad ha sido en base a un proceso participativo muy amplio”, afirmó. Entre otras restricciones, ilustró que alcance normativo sobre este territorio establece “que no se pueden interrumpir los cursos de agua, no se puede alterar el flujo normal en estos humedales, por ende, no se pueden hacer terraplenes. Entonces los alcances son muchos, y este plan de manejo como dice la Ley se puede reformular cada 5 años. Este es la primera versión, por eso el trabajo de provincia, municipio, fuerzas vivas, productores, apicultores, ONG y Fundación Humedales, que han tenido una participación que fue múltiple”, sostuvo.

 

Teniendo en cuanta que no todos puede dejar conforme el Plan, admite que “sin duda podría haber sido más ajustado, pero como lo excelente y perfecto suele ser enemigo de lo posible, de este de proceso se debe destacar que es la primera vez que se hace un proceso de ordenamiento territorial participativo en nuestra provincia con esta profundidad, con esta cantidad de encuentros que superaron las 30 reuniones, algunas con más de 100 personas, y que es un modelo de proceso para desarrollar un ordenamiento territorial. Las certezas que faltan y probables errores que se cometan, el plan tiene previsto un aprendizaje”.

 

MODERNIDAD LÍQUIDA

Debaten los usos del área protegida Islas de Victoria

Entre los sectores que expresaron su descontento los alcances del plan de manejo fue el de los ruralistas. En una declaración a la prensa dada a conocer este lunes 26 de junio, la Sociedad Rural Argentina (SRA) filial Victoria, la Federación de Asociaciones Rurales de Entre Ríos (Farer) y la denominada Comunidad Isleña Asociación Civil, expresaron que el Plan de Manejo “establece conceptos, definiciones y parámetros contradictorios desde nuestra mirada”, ya que se toma “como letra sacrosanta y hoja de ruta en esta cruzada ambientalista contra la producción sustentable de agroalimentos” (SIC).

 

Los hacendados agrupados apuntaron a supuestos “errores a la hora de tomar los límites del Departamento Victoria; la línea divisoria entre área insular y área continental, como correspondientes al área natural protegida RUM Victoria”. También cargaron contra cuestiones administrativas de la ONG Wetlands International, consultora del plan de trabajo, y que no sólo desde el sector productivo se alzaron críticas, “sino también pobladores isleños, quienes se dedican a la caza y pesca comercial y las ONG ambientalistas. Sobre todo, y en eso hubo unanimidad en la crítica, por no haber incorporado un gran número de opiniones, propuestas y pedidos de corrección”, señalaron.

En concreto la Sociedad Rural de Victoria, la Comunidad Islera Asociación Civil y la Federación de Asociaciones Rurales de Entre Ríos, se abroquelaron tras un rechazo a lo que entiende “limitaciones y prohibiciones establecidas exceden el criterio de una Reserva de Usos Múltiples”, que estas “impide el desarrollo y el empleo de técnicas modernas” en relación al uso de agroquímicos para el cultivo extensivo en el Delta y que se “prohíbe el mantenimiento de la infraestructura de caminos existentes”, en alusión al uso de maquinaria pesada hoy prohibido por la Justicia Federal para la construcción de terraplenes.

 

Berduc reconoció a ERA Verde las diferencias existentes planteadas en la audiencia pública, pero distinguió que se trataron de posiciones donde “se expusieron muchos intereses individuales y sectoriales de sacar algún rédito más, por eso es importante que lo que diga el Plan represente al bien común”, afirmó.

 

 

De la Redacción de ERA Verde