La Corte Suprema de Justicia de la Nación rechazó un recurso extraordinario presentado por el empresario Enzo Rómulo Mariani, en el marco de un juicio por usucapión sobre 807 hectáreas en las islas del Delta entrerriano. La propiedad en cuestión fue donada por el filántropo Carlos Deliot a la Municipalidad de Rosario en la década de 1940 y forman parte de una superficie mayor que denomina Estancia “La Catalina”, que se extiende en 2.204 hectáreas en el ejido de Victoria, en la isla El Charigüe. En el lugar, el hacendado construyó una coqueta mansión con pileta e importantes potreros donde cría vacas y que fue rodeada por 12 kilómetros de grandes murallas de tierra para protegerse de las crecidas, pero alterando el ambiente, según consta en los expedientes –a los que accedió ERA Verde– donde Mariani fue imputado penal y civilmente por los incendios en las islas.
Las causas iniciadas por los incendios en el Delta durante el año 2020, desnudaron la serie de irregularidades que se cometían sin ley ni control en ese vasto territorio. Entre ellas resurgió un conflicto en el cual la Municipalidad de Rosario reclama por un predio que le fuera donado y que usurpó el ganadero Enzo Rómulo Mariani para realizar sus actividades ganaderas. La cuestión es que, al llevar adelante su explotación, el empresario comenzó a ocupar una parcela del denominado Legado Deliot, un terreno insular cuyos registros señalan que pertenece a la ciudad de Rosario, pero que él tomó para su usufrutuo y pasó a reclamar para sí bajo la figura de usucapión: una prescripción adquisitiva por su ocupación a través del tiempo. Estancia “La Catalina” paso luego a ser una leyenda que comenzó a conocerse cuando Mariani tuvo que declarar ante la Justicia Federal en la causa por las quemas en el Delta. En este proceso, justamente, se ventiló la particular historia que envuelve la propiedad. Entre otros hechos escandalosos trascendieron detalles de cómo el ganadero secó una laguna y cortó cuatro arroyos para impedir que se inunde una enorme piscina que usa para refrescarse en el verano y se sitúa frente a una gran mansión.
El ganadero que bloqueó cuatro arroyos para proteger su mansión
En marzo de 2021 el juzgado Civil y Comercial de Victoria rechazó la pretensión del ganadero de quedarse con ese predio y a finales del 2022, un Tribunal de Casación también rechazó el pedido, por lo cual se fue en queja a una instancia superior. Finalmente este martes 28 de mayo, la Corte Suprema de Justicia de la Nación desestimó una queja, lo que fue leído como un gran avance para el municipio de Rosario en la disputa por tierras que se encuadran en la reserva municipal Los Tres Cerros, construida sobre las islas del Legado Leliot en territorio entrerriano. De acuerdo a lo que informó la presan local, esta área natural atraviesa un proceso de evaluación para pueda ser reconocida como parque natural.
Tras esta decisión del máximo tribunal, al empresario no le quedan instancias para continuar reclamando y se debe esperar la sentencia final de otra causa, iniciada por la comuna rosarina para lograr la recuperación definitiva de esas tierras, indicó diario La Capital.
DETALLES
En su resolución, la Corte Suprema de la Nación declara como «inadmisible» el recurso de queja interpuesto por Enzo Rómulo Mariani y, por ello, «se desestima la presentación directa». El único argumento que se lee en el documento es del ministro de la Corte Ricardo Lorenzetti, quien aseguró: «Cabe poner de relieve —a fin de evitar interpretaciones erróneas acerca del alcance de los fallos de la Corte Suprema— que la desestimación de un recurso extraordinario mediante la aplicación de dicha norma no importa confirmar ni afirmar la justicia o el acierto de la decisión recurrida». Por ello, se desestima la presentación directa. La desestimación contra el fallo en primera y segunda instancia, ahora se le sumó el de la Corte.
De esta manera, Mariani se quedó sin instancias para continuar reclamando por las tierras, que se encuadran en la reserva municipal Los Tres Cerros. Justamente, la ciudad de Rosario presentó, a principios de mayo, el plan de manejo con el que ya solicitaron a la provincia de Entre Ríos cambiar la condición a parque natural para que el nivel de conservación aumente.
LEGADO
El contador rosarino Carlos Deliot, que falleció en 1944 y poseía franjas del parque Regional Sur en la vecina ciudad, inmuebles en Fisherton, terrenos en Seguí y Rouillón (donde tenía su casa), las tierras donde hoy está emplazado el polideportivo Deliot (Seguí al 5.400) y hasta la plaza del Aguaribay (boulevard Oroño al 1.500), reveló en su testamento (fechado el 8 de diciembre de 1942) no tener hijos ni hijas naturales. El escribano Pablo del Castillo informó el resultado del mismo frente a un representante del municipio de Rosario y a algunos acreedores.
Deliot dejó dicho en su testamento que «la Municipalidad no puede disponer de los bienes relictos (bienes, obligaciones y derechos que resultan de la muerte del individuo) bajo ningún concepto, ni administrarlos, debiendo sus rentas figurar una cuenta especial» en el Banco Municipal de Rosario.
Para disponer de los bienes, la Municipalidad debía instituir una fundación por voluntad del mismo Deliot. Un año después de su muerte, el 16 de febrero de 1945, se creó por decreto esta entidad, cuya finalidad fue construir y mantener un hospicio, bajo la dirección técnica de la Sociedad Damas de Caridad. El patrimonio de la Fundación Carlos Deliot debía ser administrado por una comisión integrada por el intendente, el presidente del Concejo y el asesor letrado del Hospicio de Huérfanos. Parte de la discusión jurídica es si el deseo de Deliot era que todo su acervo fuera destinado a ser administrado por la fundación.
El deseo del contador era que se diera a la Municipalidad la posesión de los bienes no poseídos por terceros. La disputa entre el municipio y Mariani es porque el testamento tiene zonas de ambigüedad sobre si Deliot quería que Rosario terminara como dueña de las tierras.
EN LA JUSTICIA
Deliot pidió que todo lo que se genere con su patrimonio fuera destinado al Hospicio del Huérfano y su nuevo emplazamiento en el Barrio Moderno de Rosario sobre terrenos de su propiedad. El filántropo parece aclarar en su testamento que no desea que el dinero que se produzca por enajenación de patrimonio o por explotación vayan a las arcas del Estado sino a una cuenta del Banco Municipal a nombre de la Fundación para ser remitidas al Hogar del Huérfano. Pero también dice textualmente que su voluntad es que «todos mis bienes pasen a la Municipalidad de esta ciudad, a fin de que con sus rentas se construya y mantenga un edificio que lleve el nombre de un gran amigo, el doctor Mauricio Casal». Sobre esto se montó la discordia entre el municipio rosarino y el empresario Mariani.
A principios del año pasado, en el marco de una acción iniciada por la comuna de la vecina provincia para lograr la recuperación definitiva de las tierras, se trabó un embargo sobre 1.392 hectáreas en las islas entrerrianas propiedad del empresario. La Justicia de Entre Ríos rechazó un recurso extraordinario federal planteado por Mariani, que se agravió porque no le abrieron el recurso de inconstitucionalidad contra los fallos que, en primera y segunda instancia, le negaron la posibilidad de apropiarse de las tierras en conflicto a través de un juicio de usucapión.
La sucesión testamentaria tiene un largo recorrido con punto de partida en 1943. Lo cierto es que luego de un año y medio de trámites en Entre Ríos, la Municipalidad logró darle un cierre en septiembre de 2022, cuando inscribió los lotes a su nombre.
Ese fundamental paso en la transferencia de dominio de los inmuebles del legado Deliot a favor de la Municipalidad ocurrió luego de ser declarada heredera en un juicio de sucesión testamentaria. Son 16 lotes, cada uno de ellos con su correspondientes matrículas y delimitación catastral. Resta conocerse, entonces, la sentencia del juicio inicado por el municipio para lograr la reivindicación definitiva de las tierras de Deliot.
Fuente: La Capital de Rosario / Tomás Barrandeguy
Fotos: Eduardo Bodiño IG @edu_bodi
De la Redacción de ERA Verde