Junto a 78 ciudades de todo el mundo, Paraná se ha sumado a la campaña “30 días en bici”. La iniciativa impulsada por Voy en Bici Paraná propone el desafío de usar este transporte todos los días de septiembre. El compromiso simbólico queda sellado subiendo a las redes sociales una foto diaria utilizando alguna etiqueta sobre la propuesta. La pandemia, pero también un particular contexto local, ha afirmado la tendencia de los vecinos a mudar hábitos de transporte cotidiano hacia bicicleta, señalaron a ERA Verde desde la organización de la propuesta.

 

Voy en Bici Paraná invita a participar “de una iniciativa global para promover la movilidad en bicicleta”. Se convoca a todo aquellos ciclistas de la ciudad a visibilizar el uso cuando se desplazan “en bicicleta hasta su lugar de trabajo, ir a hacer compras o trámites, ir a tomar un café, un paseo o simplemente pedalear sin destino. Quienes ya realizan todas estas actividades diariamente también pueden participar e invitar a más personas”. La propuesta es poner en la agenda pública esta práctica durante los 30 días que dure el mes. A quienes acepten el desafío se les propone sacar una foto diaria de sus recorridos en bicicleta y compartirlas en sus redes sociales utilizando los hashtags #30diasenbici, #30diasenbiciparana y arrobando a @30diasenbici y @voyenbiciparana.

 

“Durante las salidas se recomienda el uso de elementos de seguridad: casco, luces y prendas reflectivas” y también respetar las disposiciones de cuidado sanitario impuestas por la cuarentena para frenar la pandemia de Covid-19, como el uso obligatorio de elementos de protección que cubran nariz y boca. “Teniendo en cuenta que la misión de la campaña global 30 Días En Bici ‘es promover y fomentar el uso diario y cotidiano de la bicicleta, como elemento de movilidad personal en el entorno urbano’, desde Voy en Bici Paraná como grupo local decidimos continuar con la acción”, se indicó luego de conocerse la extensión del asilamiento hasta el 13 de septiembre, ya que se reconoce que su “propósito trasciende a la actividad física, deportiva y recreativa” que se han restringido con las últimas medidas.

 

“La invitación a participar de 30 Días En Bici se dirige principalmente a ciclistas urbanos, es decir a quienes ya utilizan la bicicleta como medio de transporte para ir a trabajar o resolver las necesidades de desplazamiento cotidianas.  Entre tanto, para quienes aún no utilizan la bicicleta como medio de transporte, alentamos a que durante las próximas semanas se animen a experimentarlo a través de actividades que impliquen desplazamientos cortos en sus barrios de residencia tales como ir comprar alimentos, pagar las facturas, ir a la ferretería, acudir al centro médico más cercano, entre otras”.

Derribando mitos

 

Victoria Lozano, referente de Voy en Bici Paraná contó a ERA Verde que la réplica en la capital provincial forma parte de una iniciativa española que se repite todos los años desde 2013, y que a su vez tomó la acción de una idea que nación en 2010 en Minneapolis, en el norteño estado de Minesota, en Estados Unidos.

 

Voy en Bici Paraná, dice Lozano, va para el año de trabajo en la ciudad, en post de promover la bicicleta como alternativa al medio de transporte público y motorizado. También afirma, reivindican “a la calle como un espacio público entre los medio de transporte diversos. Es decir que aunque no haya una estructura segura de desplazamiento, exclusivas para quienes se desplacen en bicicletas” se proponen “promover una práctica respeto y convivencia entre los distintos actores en tránsito. Es decir que si yo voy en auto respeto al que va en bici, si voy en moto o en bici respeto al peatón y también al automovilista”. Así, se puede resumir los objetivos en estos tres ejes: Visibilización, promoción y reivindicación de la calle como espacio para los transportes diversos.

 

–¿Qué oportunidad podría representar para impulsar el uso de la bici la pandemia y otros problemas vinculados, como la merma del transporte urbano de colectivos en Paraná?

–Creo que ya es un hecho que la bicicleta es una alternativa al medio de transporte masivo, sobretodo en este contexto de pandemia. No es algo que digamos nosotros; la Organización Mundial de la Salud ya lo recomendó en abril. Teniendo en cuenta esta recomendación, nosotros también estamos aprovechando para visibilizar muchísimo más a la bicicleta como medio de transporte. En nuestra ciudad pasa la cuestión particular que en los últimos meses, y en el último año quizás, muchísimas personas cambiaron sus modos de transporte por los reiterados paros, porque se aburrieron de que el colectivo no pase, de las esperas. Así que en ese sentido no es sólo la pandemia que está profundizando el uso de la bicicleta, sino que el contexto local se decida a usa la bicicleta.

 

–El sentido común plantea que Paraná “no es una ciudad para la bici”, por sus pendientes y bajadas ¿Qué se puede decir al respecto para desmontar este prejuicio?

–Voy en Bici Paraná desde sus inicios ha trabajado muy fuerte para derribar ese mito que sabemos está muy arraigado socio culturalmente. Pero lo que decimos siempre es que en cada pedaleada, quienes nos desplazamos a diario demostramos que sí es posible. Entonces tienen que ver con una transformación sociocultural para ver la bicicleta como medio de transporte y también en ver al ciclista como parte del transporte activo de la ciudad.

Creo que los hechos demuestran que la bicicleta es un medio de transporte usado por muchísimas personas de distintos sectores sociales en la ciudad de Paraná. La práctica del ciclismo urbano no es nueva en la ciudad; tiene muchísimos años y entonces es como que los hechos derriban el mito o los preconceptos de que no se puede utilizar en la ciudad. Desde Voy en Bici hemos conocido numerosas experiencias, desde gente muy joven hasta un hombre de hasta 84 años que sigue yendo a trabajar en su bicicleta como lo hacía desde hace 30 años. Su edad no se lo impide, no se lo impide las pendientes, así que claramente es un preconcepto que hay que trabajar a diario.

 

–Frente a un escéptico de la bicicleta como medio de uso y transporte ¿Cuáles serían tres beneficios o aportes que le dirías para tratar de convencerlo rápido y contundente?

–Es un medio de transporte ecológico, sustentable, que trae numerosos beneficios para la salud; porque mientras uno se está desplazando realizar actividad física y es muy beneficioso para el cuerpo. Es un medio de transporte silencioso, no emite gases, contribuye al medio ambiente, y también es muchísimo más barato que cualquier otro. Es un medio de transporte noble que además permite una conciencia y una percepción de la ciudad que es totalmente diferente a otro medio de transporte. Cada cual tiene sus características, pero en la bicicleta hay cuestiones del paisaje, el entorno, de las demás personas que se perciben por el simple hecho de ir pedaleando. Así que el escéptico para mí tendría que animarse; a que pruebe.

 

–¿Qué política de Estado sería apropiada o beneficiosa para promover la bicicleta en Paraná?

–Hay muchísimas, pero creo que las políticas de movilidad urbana tendrían que basarse en los consensos entre los gobiernos locales y la ciudadanía. Invitar a la ciudadanía a participar de estos procesos para no tomar decisiones unilaterales, porque finalmente la gente es la que va a hacer uso de las obras que se hagan. Tiene que haber un componente muy fuerte en educación vial. Porque los accidentes son otra gran problemática de la movilidad urbana y en mucho de estos accidentes se ven involucrados ciclistas. También tiene que haber campañas de promoción y del respecto. No hay una receta que se diga que una política de Estado funcionó en Brasil, en Buenos Aires, en Bogotá y va a funcionar aquí en Paraná. Creo que es una cuestión de analizar qué características tienen el territorio y asimismo ir buscando las necesidades. No calcar modelos si no inspirarse, adaptarlo y preguntarle al territorio y la ciudadanía qué necesitan y ahí poder dialogar técnicos, usuarios, el vecino. Una política de movilidad urbana genera la apropiación a largo plazo.

 

 

De la Redacción de ERA Verde