La autorización municipal para instalación de una empresa con antecedentes de acopio ilegal de pescado ha encendido las luces de alarma en el Foro Ambiental Gualeguay. El intendente  Federico Bogdan firmó un decreto que otorga el permiso de uso de suelo en un terreno camino a Puerto Ruiz al Frigorífico Transfish SRL, sobre quien pesa una seguidilla de acusaciones por manejos irregulares. Se calcula que en la actualidad en esa valorada cuenca ictícola se extraen unos 25.000 kilos de sábalos que se procesan en factorías de Diamante y Victoria.

 

El Foro Ambiental Gualeguay ha comenzado a movilizarse para oponerse a la instalación de Transfish SRL, un frigorífico que ha obtenido luz verde para asentar un centro de acopio y procesamiento de pescado de río en un lugar clave en cercanías del río Gualeguay. La firma oriunda de San Fernando, provincia de Buenos Aires, desde hace años opera en Entre Ríos acondicionando sábalos para el mercado interno y para exportar, pero con prácticas non santas. Su poder de depredación y evasión de la ley se puede ejemplificar en el caso que marzo de 2018 la involucró en un operativo de la Dirección General de Fiscalización Agroalimentaria provincial, cuando le fueron decomisadas a la firma 13 toneladas de pescado de las cuales sólo había declarado una. A los diez días de este episodio, pescadores de Rincón de Nogoyá denunciaron que un camión de Transfish asechaba recolectando mercadería de forma ilegal.

 

Ahora, Transfish SRL quiere instalarse en la provincia y eligió Gualeguay para asentar sus bases. “Nos enteramos por la prensa”, contó a ERA Verde Ramón Velázquez, del Foro Ambiental. El referente social contó que la preocupación por estos anuncios estriba en que “el río Gualeguay además de atravesar toda la provincia, su cuenca es una zona de desove de especies como el patí, bagre, surubí, boga, dorado, tarucha, y sábalo, que se verían afectados en caso de instalarse un frigorífico”.

 

Velázquez entiende que cuando se anuncia la posible apertura de una industria sea de interés para la comuna por las posibilidades de fuentes laborales que en estos tiempos son escasas. Pero según argumentó, este trabajo puede generarse de forma genuina desarrollando potencialidades e incluso sacando de la precarización a quienes hoy podrías ser los beneficiarios directos de este frigorífico. “No se han generado alternativas”, reprochó.

 

En la actualidad, apuntó el integrante del Foro, se extraen unas 25 toneladas semanales de sábalo con destino a frigoríficos ubicados en Diamante y Victoria. “Y es un recurso finito, puede acabarse en algún momento. En otros lugares de Argentina como Corrientes inclusive se han tomado otras alternativas. Los pescadores con trasmallo se han volcado a ser guía de pesca deportiva o pueden hacer cría de boga, sábalo, dorado y el pacú”.

 

Conocedor de la zona y del río Gualeguay, Velázquez insiste: “Estamos en deuda con la naturaleza, porque estamos sacando más de las posibilidades que se puede reponer. Por esto, entre otras cosas, nos oponemos al frigorífico”, señaló.  Y adelantó que ha comenzado a generarse un movimiento para que se derogue el decreto del intendente Bogdan, al mismo tiempo que puedan buscarse “alternativas para que estos pescadores puedan desarrollar otras actividades, inclusive agregando valor al pescado que artesanalmente hoy están sacando”.

 

De la Redacción de ERA Verde