En su paso por la capital provincial, el ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación, Juan Cabandié, afirmó hoy que continúa «exigiendo a la Justicia que trabaje para que los habitantes de la costa del (río) Paraná puedan vivir sin respirar humo», luego de los incendios provocados en las islas del delta durante 2020 y 2021.

 

«Tenemos que hacer un cambio cultural de paradigma y de métodos, pero de manera sostenible, por eso trabajamos en una concientización social», dijo el ministro Cabandié, en declaraciones con motivo de una gira que lo trajo a la provincia de Entre Ríos en la cual realizó una serie de actividades y recorridas junto al gobernador, Gustavo Bordet

 

Tras entregar maquinaria para la Gestión Integral de Residuos Sólidos Urbanos en Paraná, Cabandié y Bordet se trasladaron a la localidad de El Pingo para recorrer la obra de la futura planta de reciclaje, en el marco del «Plan Integral Casa Común».

 

En ese marco, el funcionario nacional destacó «el compromiso del Gobierno nacional que se materializa» con estas inversiones, de unos $37 millones en el caso de las maquinarias para la capital entrerriana.

 

Las mismas «se hacen en virtud de pensar en una Argentina que pueda mejorar su gobernanza en términos ambientales», y los residuos y su tratamiento «es algo fundamental que hay que solucionar. Este es un primer avance en un problema de muchos años, hay 5.000 basurales a cielo abierto en todo el país», dijo Cabandié, y resaltó que también estas inversiones «son generadoras de empleo».

 

Luego llamó a mantener «la inversión del Estado y un compromiso del sector público y privado» para «abordar la problemática, entendiendo que hay un atraso y debemos ir paliando esa situación».

 

Bajante

 

Respecto a la bajante del río Paraná, el ministro señaló que esa problemática «necesita también tener la intervención del Estado», y por eso se comenzó la licitación y compra de cinco faros de conservación.

 

Recordó también algunos detalles en torno a la inversión de más de 500 millones de pesos para la provincia de Entre Ríos para mitigar las consecuencias del cambio climático ciudades costeras del río Uruguay, con financiamiento del Banco Mundial. En cuanto a la bajante del río Paraná con parámetros similares a la de 1944, dijo que se «necesita también tener la intervención por eso se está en etapa de licitación y compra de faros de conservación que incluye infraestructura, cámaras, drones, equipamiento, entre otros”.

 

Apuntó que “ya están en construcción dos de esos faros, son cinco en total, que estamos haciendo con la transparencia debida, por eso a veces los procesos de licitación llevan tiempo, pero es así como se tiene que manejar el Estado, con transparencia y con mecanismos públicos. Creo que la bajante del Paraná es la metáfora que nos tiene que llamar la atención a todos como sociedad, como humanidad; es una necesidad que tenemos de ir adaptándonos, porque los bienes naturales son los recursos escasos del siglo XXI; y sin esos bienes naturales no vamos a conocer la vida como la conocemos hasta ahora», advirtió.

 

En ese sentido, refirió que «el informe de la ONU sobre la aceleración y las consecuencias del cambio climático está muy presentes en todo el país, pero también en el mundo; y sobre todo en el hemisferio norte, aunque no discrimina el hemisferio sur. Por eso es que tenemos que ir en un camino donde lo que hagamos sea de forma sostenible y eso es un cambio cultural, con el sector productivo, con el Estado, con la ciudadanía. Por ello apelamos a esta concientización”.

 

Destacó que «por eso con el gobernador firmamos la semana pasada un acta acuerdo, para ir trabajando en pos de un área protegida, un nuevo parque nacional en la provincia de Entre Ríos, y tenemos que ir avanzando en esta agenda».

 

Pedido de Justicia

 

«Nos tiene que llamar la atención a todos como sociedad -continuó-, ir mitigando y adaptándonos porque los recursos naturales son los bienes escasos del siglo XXI, y sin esos recursos no vamos a conocer la vida como la conocemos hasta ahora», sostuvo Cabandié y llamó a un «cambio de paradigma, de métodos y cultural», aunque «siempre falta algo, y a veces la Justicia tiene tiempos que no son los de la gente».

 

En ese sentido, recordó que durante 2020 y 2021 se generaron numerosos incendios en el delta del río Paraná que afectaron el ecosistema y la flora y fauna autóctona, pero también la vida urbana colmando de humo y cenizas las principales ciudades costeras.

Respecto a las quemas de pastizales, señaló que “si uno compara lo que significó el año pasado con este ha habido un avance importante, en términos de que han disminuido los focos ígneos; no significa que estemos exentos porque hasta hace pocos días todavía seguían algunos focos activos. La provincia está trabajando muy bien con el combate a los incendios forestales y desde Nación estamos apuntando esa tarea”. Pero, planteó, “siempre falta algo y lo tenemos muy presente, a veces la Justicia tiene tiempos que no son los de la gente, lamentablemente», dijo e hizo notar que en un incendio forestal «hay tres patas: el que prende; el que tiene que apagarlo, en este caso el Estado; y el que tiene que reprender al que lo prendió; y si falla la Justicia, que es la que debe reprender, castigar en el marco de la ley a quien lo prendió, se va a seguir haciendo”.

 

Y en este orden dijo finalmente que va a «seguir exigiendo a la Justicia que trabaje para que todos los habitantes de la costa del Paraná puedan vivir sin respirar humo».