La entidad agropecuaria del sur entrerriano salió a contestar a la Asamblea Ambiental de Gualeguaychú, tras dar a conocer un duro documento donde apuntaron contra las fumigaciones y el uso del glifosato. Los asambleístas dijeron que el gobierno provincial es permeable al agronegocio, así como desdeñaron las prácticas con agrotóxicos. Los ruralistas criticaron la ausencia del Estado y afirmaron que son no “cómplices del deterioro del medio ambiente”.

 

En una proclama denominada “Se terminan los tiempos, las alertas y la paciencia”, la Asamblea Ambiental Ciudadana de Gualeguaychú dio a conocer el 2 de enero pasado su posición respecto a los temas más candentes y problemáticos. Entre los ítems salientes se reprochó el descontrol en el uso de “agrotóxicos potencialmente cancerígenos en las actividades productivas”, al tiempo que sostuvieron su oposición al uso de estas substancias hasta que se demuestre que “no daña la salud humana”. En este sentido, no se ahorraron críticas a los legisladores y el Ejecutivo provincial por resistir la prohibición de pulverizar alrededor de las escuelas rurales.

 

Además, la Asamblea Ciudadana afirmó que “existe un apoyo manifiesto del Gobierno de Entre Ríos hacia los sectores concentrados de la producción agrícola a favor del uso de agrotóxicos”, y en este orden “resultan patéticos argumentos tales como ‘uso racional’ o ‘buenas prácticas’ en el uso de estos venenos”.

 

Respuesta

 

Tras conocerse la declaración de los asambleístas, la Sociedad Rural de Gualeguaychú emitió una réplica, donde si bien declaran que no es intención generar un enfrentamiento, tienen la necesidad de “dejar aclarado públicamente una serie de aspectos en lo atinente a la labor de la SRG y de los productores en general”.

 

La entidad agraria plantea así que “los productores nos adaptamos a los actuales modos de producción, como nos adaptaremos al que llegue en el futuro. Dicho esto, queremos destacar que los productos utilizados cuentan con la aprobación y habilitación de los organismos sanitarios de nuestro país. Usamos productos que tienen el visto bueno de los profesionales y científicos argentinos y los usamos dentro del marco legal vigente”.

 

Aclarando que no avalan a pares que ponen en riesgo el ambiente, se manifestaron “de acuerdo con los controles y con el uso eficiente, seguro y racional de los fitosanitarios. Apoyamos las buenas prácticas agrícolas porque somos custodios de nuestro entorno”. Tras lo cual admitieron que “en este contexto, resulta sumamente necesaria la participación eficiente del Estado entrerriano a los efectos de controlar y castigar a quienes se apartan de las buenas prácticas agrícolas. Es un claro rol del Estado el ejercicio del poder de policía, y a decir verdad, durante mucho tiempo ha tenido enormes falencias en esa obligación”.

 

Por otra parte los ruralistas dijeron que tampoco se oponen a la agroecología como alternativa al modelo imperante, pero que la conversión deberá llevar un tiempo. “En definitiva, lo que queremos dejar en claro es que no somos cómplices del deterioro del medio ambiente. Tampoco es verdad que privilegiamos el lucro, por sobre la salud y la vida. Somos productores agropecuarios que trabajamos según las reglas de juego vigentes, atadas a un sistema global de producción, que no elegimos ni vitoreamos”.

 

Por último, desde la Sociedad Rural de Gualeguaychú enunciaron estar “dispuestos al diálogo permanente, a la búsqueda de consensos y en ese marco, estamos a disposición de la Asamblea Ambiental para reunirnos cuando lo consideren pertinente a los efectos de discutir con madurez estos temas tan importantes para nuestra vida cotidiana”.

 

De la Redacción de ERA Verde