Entre Ríos suma cada vez más opciones para los amantes del trekking rural. Con circuitos para distintos niveles de entrenamiento, la propuesta es la misma: Hacer deportes y estrechar el vínculo con la naturaleza.  Esta vez, ERA Verde participó de una recorrida por los inigualables senderos de montes y arroyos de la zona de La Picada, en el departamento Paraná.

Hasta hace unos años, salir a tomar mates al viejo Puente de La Picada, sobre el arroyo Las Conchas, solía ser una de las opciones para el paseo de quienes quería alejarse un poco del ruido de la ciudad.  También se podía pasar el día en establecimientos de camping de la zona con acceso a las sinuosas aguas de ese curso de agua. Hoy, el encanto de ese paisaje de arenas claras, vegetación agreste y aire fresco sigue convocando al disfrute.

El lugar se encuentra a unos 27 kilómetros del centro de la capital provincial, y se accede por la Ruta Nacional 12. La localidad de La Picada es claramente identificable por el antiguo puente ferroviario que se ve antes de llegar paralelo al acceso vial. Todavía en pie, se conserva buena parte de la arquitectura de hierro dinamitada en 1962 en el enfrentamiento de entre Azules y Colorados, las facciones de las fuerzas armadas que se disputaban la dirección del gobierno de facto de entonces.

Ahora, este paraje, un clásico para el turismo aventura familiar sobre esas playas bravas, convoca a recorrerlo en una propuesta de senderismo monte que bordea los arroyos de la zona

El recorrido no es exigente pero requiere algo de resistencia física, porque se camina 2 horas y se descienden y trepan algunas barrancas

 

La caminata con una guía local parte de la placita de La Picada, desde donde se pueden adentrarse al monte. Se recomienda llevar calzado cómodo, calzas o pantalones largos para evitar las picaduras de mosquitos. También usar gorro, pantalla solar y repelente de insectos.

 

Se recorren distintos senderos de bosque nativo, se trepa por la vía antigua y desde allí se observa también el puente viejo de La Picada

 

Se proponen bajadas a la playa para contemplar de cerca el arroyo y luego se continúa descendiendo a la par de las aguas a la confluencia entre Las Conchas y arroyo Espinillo.

Es un recorrido fácil y muy recomendable por las oportunidades de observación y valoración de nuestros ambientes nativos.

 

Los interesados en este recorrido, se pueden comunicar con Susana, al 343 4523159.

 

 

Fotos: Gentileza Silvia Schierloh y Myriam Olego.

De la Redacción de ERA Verde