El titular del Juzgado Federal de Victoria, Federico Martin, resolvió no hacer lugar a un pedido para construir un complejo turístico en la zona de islas del Delta entrerriano frente a la ciudad de Rosario. La solicitud la había ingresado el empresario del espectáculo Federico Andrés Vignale, con la idea de explotar un espacio recreativo con el atractivo central de que iba a contar con una “biopiscina”. El magistrado apuntó a que el también productor ganadero comenzó la construcción con obras no declaradas y sin contar con el certificado de aptitud ambiental. Además, se dejó sentado que el peticionante cuenta con una causa que se tramita en el mismo juzgado por “desobediencia” ante la presunción de haber realizado desmonte en el predio en cuestión.

 

Este miércoles 3 de mayo quedó firme una resolución del juez Martin, en donde desestima la autorización “de Federico Andrés Vignale para construir y explotar un complejo turístico y recreativo” en un inmueble en la zona de islas del ejido de la ciudad de Victoria, frente a las costas rosarinas, consignó el sitio Suma Política.

 

Vignale llegó a los tribunales a pedir permiso porque para los humedales del Delta rige una cautelar del juez Federal Nº 2 de Paraná, Daniel Alonso, del 1 de julio de 2020, donde establece una serie de restricciones para prevenir incendios. Entre las medidas entonces dictadas se establece la prohibición de realizar endicamientos y terraplenes, por lo cual tampoco está permitido el uso de vehículos para efectuar tales trabajos. Vignale alega que para el caso de su emprendimiento no se prevé construcción de diques, por lo cual solicita que se lo licencie para el uso de maquinaria pesada en la zona, y que la tierra removida se “reutilizará para hermosear el solar, con la construcción de un parque con especies autóctonas, plantas con flores de estación y lo que sea necesario para el embellecimiento del predio”, manifiesta en el expediente.

 

Federico Andrés Vignale es señalado por organizaciones ambientales de Rosario por sus antecedentes de realizar fiestas electrónicas ilegales en la zona del Delta del Paraná. Su padre, Enzo Federico Vignale, es asimismo sindicado como uno de “los dueños del fuego”, y fue citado a declarar en 2020 por la Justicia Federal en las investigaciones por los incendios en el Delta. Ambos se dedican al engorde de invernada de ganado bovino, pero Federico Andrés también realiza convocatorias danzantes en el predio que administra la familia sobre el lado sur de la ruta 174 que une las provincias de Entre Ríos y Santa Fe, en el kilómetro 7,3, en el boliche a cielo abierto conocido como “Waves Island”.

 

BALNEARIO AL NATURAL

 

Para que le aprueben la construcción del estanque de aguas recreativas con depuración natural mediante plantas, el empresario rosarino agrega a su planteo al Juzgado que ya solicitó a la Municipalidad de Victoria “una inspección in situ del lugar” para que elabore “un informe de factibilidad sobre la instalación de la biopiscina”. Martín solicita entonces esa evaluación en donde la Dirección de Obras Privadas del municipio entrerriano constata “ampliaciones no declaradas de infraestructura, y movimientos de suelo en la zona en donde se ubicaría la biopiscina”. Esto lo realiza a pesar de que aún restaban condiciones para su aprobación “y pese a estar notificado de la cautelar vigente que –según sus dichos– impediría su realización”. También se da cuenta que, sobre la marcha, el emprendedor modifica el trámite de habilitación del lugar cambiando el rubro del negocio, de ser “complejo deportivo, recreativo y/o turístico” al de “servicios gastronómicos”.

 

Para definir la situación, el magistrado de Victoria también solicitó documentación a la Secretaría de Ambiente de Entre Ríos. Desde esta dependencia se señala que el proyecto presentando en un primer momento para construir el complejo recreativo no requiere contar con Certificado de Aptitud Ambiental “por ser una actividad de bajo impacto”. Pero se aclara el diseño original sufrió modificaciones, donde se prevé “la construcción de un camino sobreelevado” que “no se encuentra autorizado”. Esta oficina ratifica asimismo que se han realizado “ampliaciones no declaradas y movimientos de suelo en la zona donde se ubicaría la biopiscina”.

 

Martín agrega en su escrito que, en la Secretaría Penal de su Juzgado, se “tramitan causas en las que se imputa la presunta comisión del delito de desobediencia” de Vignale, “por la constatación en febrero y marzo de este año de supuestos movimientos de suelo y/o desmonte en el predio en cuestión”, por lo cual remite estos antecedentes a la autoridad ambiental entrerriana.

 

Ante este estado de la cuestión, con fecha 24 de abril, el juez Federal de Victoria resolvió “no hacer lugar al pedido de autorización” para “construir y explotar un complejo turístico y recreativo”, señalando que la misma debe “ocurrir por la vía pertinente”, tras lo cual notifica a la Municipalidad de Victoria y el Secretaría de Ambiente de Entre Ríos. Vencido el plazo de apelación este 3 de mayo a las 9:00, la resolución quedó firme, se confirmó oficialmente.

 

Siguen las fiestas electrónicas ilegales en el Delta

Con información de Suma Política

De la Redacción de ERA Verde