El MST se sumó al pedido de la Cámara de Diputados de Entre Ríos para que el Ejecutivo provincial tome cartas en el asunto ante la depredación ictícola que se produce en el Paraná Medio. También proponen un organismo de control mixto. La solicitud se suma a quienes alertan sobre el saqueo en el río que se ha visto agravado por la persistente y pronunciada bajante. En Chaco y Corrientes ya rige la prohibición en la captura de las especies más buscadas.
Nuevas voces se suman al pedido para que la administración provincial intervenga ante las problemáticas asociadas a la gran bajante del río. Esta vez, en un comunicado, desde el Movimiento Socialista de los Trabajadores (MST) reclamaron a los gobernadores de Santa Fe, Omar Perotti, y de Entre Ríos, Gustavo Bordet que hagan algo para frenar la depredación pesquera. Desde la Red Ecosocialista región Litoral de la agrupación que integra el Frente de Izquierda, exigieron “la inmediata veda pesquera imponiendo fuertes sanciones a los frigoríficos y empresas que no cumplan. La plena garantía laboral y salarial de los 5.000 puestos de trabajo (de pescadores). Y como los distintos gobiernos y sus organismos dependientes han demostrado connivencia empresarial e inoperancia a la hora de controlar la actividad, proponemos la formación de un Comité de Control provincial, integrado por miembrxs de asociaciones pesqueras, activistas y técnicxs especialistas, que elaboren y controlen la política a llevar a cabo durante este periodo”, plantearon.
Estado y “avivadas”
El pasado jueves la Cámara Baja entrerriana aprobó, entre otras iniciativas, un proyecto de resolución que insta a la provincia a que efectúe una veda de las especies en peligro del río Paraná y efectúe los controles pertinentes. La propuesta de la diputada María Gracia Jaroslavsky (UCR-Victoria) insta a que el Ejecutivo entrerriano prohíba la pesca de especies en peligro en el río Paraná. La resolución solicita a su vez que se extremen los controles mientras dure la medida.
Desde el MST, en tanto, se planteó que la bajante de los ríos Paraná e Iguazú a niveles que según especialistas es comparable con la sequía de 1971, agravan las consecuencias ambientales. “Ante esta situación, provincias como Chaco, Corrientes y Misiones ya han declarado la veda pesquera, dado que por la sequía urge proteger las distintas especies de peces que se concentran en las zonas que aún tienen agua. Pero hasta ahora el gobernador de Santa Fe, Perotti, y el de Entre Ríos, Bordet, parecen no escuchar los reclamos que exigen reducir o directamente suspender la pesca comercial y deportiva, por lo menos hasta que se recuperen los niveles hídricos previos a la bajada”, afirmaron.
Para dar cuenta de la situación, el parte de prensa dado a conocer desde la izquierda alude a la información que se conoció recientemente en donde “frigoríficos de explotación ictícola que operan en Entre Ríos y Santa Fe, como no tienen control de ningún tipo, aprovecharon el momento (del estado del río) para lanzar sus redes extrayendo miles de kilos de pescado. Según asociaciones de pescadores eso constituye una depredación que hay que frenar urgentemente”, clamaron.
Mapa ambiental
Desde la Red Ecosocialista del Litoral plantearon también que “esta bajada histórica se relaciona con la crisis climática que azota el mundo y nuestra región, y que ocasiona inundaciones y sequías cada vez más recurrentes. Por eso también es necesaria la transición hacia un modelo de pesca y uso de nuestro río que contemple la biodiversidad, el ecosistema y las necesidades sociales mayoritarias. Es decir, que no esté orientado por la ganancia capitalista. Frente a las variantes climáticas extremas que estamos viviendo, es fundamental detener los desmontes y el agronegocio”.
Finalmente, en el documento que firman los referentes Nadia Burgos y Nacho Mancini señalaron que “el impacto sobre los ciclos del suelo y el agua están a la vista y las consecuencias las pagamos las poblaciones. Necesitamos un cambio de raíz del modelo productivo, salir del extractivismo y avanzar a un modelo de producción agroecológico y democrático, con reforma agraria. Vivimos a la vera de ríos intervenidos por la acción humana, las represas en llanura deben ser prohibidas ya que impactan sobre el curso natural de los ríos y sus dinámicas”.
De la Redacción de ERA Verde