En el marco de la Huelga Mundial por el Clima, se llevó adelante en Paraná una concentración convocada por distintas organizaciones sociales, políticas y ambientales. Fue en Peatonal San Martin, frente a la sede de la Bolsa de Cereales de Entre Ríos, donde hubo micrófono abierto y se leyó un documento. Los manifestantes intervinieron la fachada de la sede corporativa con dibujos contra las fumigaciones. Hubo un fuerte reclamo por el tratamiento de la Ley de Humedales.
«Paren de fumigar», «Ley de Humedales ya» y «Quemas y agrotóxicos, el negocio de matar», fueron las consignas que se exhibieron en la tarde de este 23 de septiembre en la manifestación que un grupo de organizaciones realizó frente a la sede de la Bolsa de Cereales de Entre Ríos, en Peatonal San Martín al 500. Participaron el Foro Ecologista Paraná, la Fundación por el Arbolado de Paraná, la Unidad de Vinculación Ecologista, la Red Ecosocialista del Movimiento Socialista de los Trabajadores (MST) e integrantes de la Multisectorial por los Humedales entre otras ONG y entidades bajo el reclamo sintetizado en la consigna «Entre Ríos sí, entre llamas, no».
Este lema también le dio nombre a un documento que se dio a conocer en el que se apunta que «el humo sobre las ciudades es solo una de las consecuencias de la destrucción de nuestros humedales. Desde el 2020, momento en que el río Paraná atraviesa su máxima bajante histórica, se han quemado intencionalmente más de 1 millón de hectáreas en todo el territorio del Delta del Paraná y alrededores», dice el documento que se leyó. «La pérdida de humedales es la punta del iceberg de un modelo de producción dominado por la mercantilización de la naturaleza, donde la ganancia de las corporaciones se impone sobre el cuidado del ambiente, el acceso a la tierra y la salud de las poblaciones».
Al referir a los humedales, el documentó señaló que se habla “de vida, y de la subsistencia de toda la diversidad biológica y cultural que allí se encuentra. Su importancia viene por las funciones ecosistémicas que cumplen ya que regulan las inundaciones, funcionan como grandes esponjas que absorben agua. Regulan el clima almacenando el dióxido de carbono de la atmósfera a través de las diversas especies de plantas que viven allí. Purifican el agua, filtran y retienen sustancias contaminantes, proveyendo de agua potable a toda la población, son sitios de recarga de acuíferos. Los humedales proveen alimentos, madera, plantas y medicinas. Por lo tanto tienen un gran valor como patrimonio cultural, son sitios de preservación de nuestra identidad”.
Precisamente en el día en el que se lleva adelante la huelga mundial por el clima, la declaración denuncia que “las quemas están destruyendo nuestros territorios y nuestro futuro. Las estadísticas hablan solas: desde que comenzaron las quemas, crecieron las cabezas de ganado en las islas”.
EN EL CONGRESO
Se recordó que el plenario de comisiones en la Cámara de Diputados de la Nación para trata la Ley de Humedales realizado este jueves 22 de septiembre “evidenció quiénes se oponen a la Ley de humedales, evidencio los que están detrás del fuego: por un lado, los grandes productores ganaderos y del agronegocio con representantes en la Mesa de Enlace y en Juntos por el cambio. Que intentan dilatar el debate en plenario con la clara intención de modificar el cuerpo de la Ley de humedales cambiando el concepto de Humedales y disminuyendo el alcance de la protección sobre estos para poder avanzar extractivamente”.
Por otro lado, se apuntó que “el Frente de Todos, Alberto Fernández, Gustavo Bordet, el ministro de ambiente (Juan) Cabandié, responsables políticos y judiciales que por acción u omisión garantizan la impunidad de quienes están detrás de los incendios. De hecho gran parte de las tierras del Delta que se vienen quemando son de dominio público entrerriano, donde se encuentran establecimientos productivos que fueron cedidos a los amigos del poder, terratenientes de la zona a cambio de arreglos políticos. O son incluso utilizadas por los mismos dueños de la gestión como es el caso del intendente de Victoria Domingo Maioco o Manuel Passaglia intendente de San Nicolas. Por esto decimos una vez más: Basta de entregar nuestras tierras, el gobierno provincial es cómplice y responsable de este ecocidio!”, reclamaron.
“Marchamos, nos organizamos y reclamamos porque sabemos que otras formas de producir son posibles, no solo posibles sino necesarias y urgentes. Que no nos mientan con el verso de la producción y el desarrollo, ¡este modelo no es desarrollo! Porque no sólo no contempla el bienestar ambiental, sino que genera una desigualdad social inmensa. Este es el resultado del modelo productivo extractivo y de su ‘progreso’: humedales incendiados, ríos contaminados, destrucción ambiental, y una sociedad profundamente desigual, un modelo que concentra las riquezas en manos de unos pocos a costa de nuestra salud, nuestro empobrecimiento. Escuelas fumigadas, familias campesinas expulsadas de sus territorios para expandir la frontera agrícola. Que no nos mientan, esto no es desarrollo. Por todo esto queremos que en cada rincón del país se escuche con fuerza: hay una deuda de esta democracia con los territorios, de hace más de 10 años, ¡queremos ley de humedales ya! pero no cualquier ley exigimos al Congreso se respete el texto del Proyecto de Ley de Humedales (Expte. 0075-D-2022) que fue consensuado por más de 500 organizaciones
socioambientales de todo el país, con plena participación ciudadana y apoyado por la comunidad científica”, reiteraron.
Finalmente, se planteó que “contra la costumbre de dilatar al servicio de las ganancias de unos pocos, de juntar dólares para el FMI y de responder las demandas de sectores minoritarios y concentrados de la sociedad nos declaramos en alerta y somos contundentes: Vamos a seguir organizadxs y luchando en las calles, hasta que sea ley y hasta impulsar una transformación productiva : Basta de quemas!! Ley de Humedales consensuada! ¡Qué arda el extractivismo, no los humedales”, se exclamó en el documento.
De la Redacción de ERA Verde