Las autoridades del Colegio de Profesionales de la Agronomía de Entre  Ríos (Copaer) reprocharon una actividad artística pedagógica desarrollada en escuelas rurales del departamento Uruguay. La titular de la agrupación de ingenieros agrónomos, Carina Gallegos, expresó su malestar con el abordaje realizado sobre las pulverizaciones con agroquímicos en la obra “Merceditas y el maestro, la historia de la escuela fumigada”. Su autor, el marionetista Hugo Peruzzo, señaló un intento de censura sobre el trabajo teatral. Desde la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer), el secretario de Formación Política y Sindical, Mario Bernasconi, pidió evitar definiciones apresuradas e invitó al diálogo respetuoso y a conocer la obra. También apuntó a ERA Verde que no permitirán que se instalen “concepciones persecutorias y sancionatorias hacia ningún docente”.

 

A través de una publicación periodística en diario El Día de Gualeguaychú se dio a conocer que el Colegio de Profesionales de la Agronomía de Entre Ríos (Copaer) se reunión en esa ciudad en donde un punto de la agenda fue tratar “una inquietud de profesionales de la zona de Basavilbaso, (y) Macía” sobre “una obra de títeres en la cual se representa una situación de dos alumnos y un docente, en el marco de una pulverización en cercanías de una escuela rural con un contenido bastante distorsionado de lo que es la realidad”, comentó la titular del Colegio, Carina Gallegos, sobre una actividad desarrollada en escuelas rurales. Así, la agrónoma se despachó ante medio gualeguaychuense: “Tenemos una normativa que está regulando como deben realizarse las pulverizaciones en escuelas rurales, por lo cual este tipo de contenidos impuestos en ámbitos académicos a chicos de corta edad nos parece sumamente reprochable, especialmente porque se distorsiona la realidad y se desinforma a un nivel de edad en la cual las personas son muy permeables a lo que reciben. Y sinceramente nos preocupa sobremanera que esta obra se esté montando en un ámbito institucional como lo es una escuela”.

La profesional agregó que “generar este tipo de acciones dentro del ámbito estudiantil lo único que logra es fomentar la división, la discriminación de unos contra otros, debido a que en ese ámbito educativo, el rural, concurren hijos de productores, aplicadores, vendedores de insumos, ingenieros agrónomos, en definitiva de todos los actores de la sociedad y el hecho de brindar este tipo de mensajes en un contexto social bastante agresivo que vemos diariamente en los medios con muchos casos de bullyng que han llevado a que niños de corta edad hayan tomado decisiones drásticas, hacer este tipo de obras  agranda los procesos de juzgamiento de unos hacia otros. Además no está dentro de un contexto educativo, pedagógico con una información falsa totalmente”, sostuvo.

 

La obra que agitó la polémica es “Merceditas y el maestro, la historia de la escuela fumigada” que comenzó a darse en distintos establecimientos educativos de la provincia desde principio de año, comentó a ERA Verde el secretario de Formación Política y Sindical, Mario Bernasconi. El dirigente sindical comentó que la puesta forma parte de las propuestas que lleva adelante la secretaría a su cargo y que “es la primera vez que nos pasa una situación así”. Bernasconi convocó a “no apresurarnos con la toma de definiciones tan drásticas porque golpean y tienden a impactar y herir a personas que pueden ser docentes, padres y por eso hay que tener mucho cuidado con los planteos que surgen desde la angustia y la calentura sin que haya un tiempo para pensar si esto realmente es así o no. Nosotros estamos dispuestos a reunirnos, a charlar y sobre todo hablar con los papás sobre la propuesta que estamos llevando adelante sin ningún tipo de inconvenientes. Cualquier consideración estamos a disposición de lo que sea necesario hablar sobre todo para llevar tranquilidad al conjunto”, apuntó.

Carina Gallegos, titular del Copaer y Julio Maisterrena, vocal regional A suplente

CONTEXTO

 

Ante la controversia, el titular de Formación Política y Sindical del sindicato docente expresó que vienen siguiendo de cerca el intercambio de opiniones que ha generado la obra. “Hay varias cuestiones para decir sobre la obra y también sobre el contexto que se desarrolla. En principio no es una experiencia que surja de un día para otro y como acto reflejo de una intervención política partidaria. Absolutamente lejos de toda esa cuestión y de toda esas valoraciones. Entendemos que hay un clima de mucha angustia y malestar social por sucesos por la cual atraviesa nuestra provincia y nuestro país, pero la primera cuestión que queremos dejar en claro es separar absolutamente una cosa de la otra, no tienen nada que ver. Sobre todo para llevar tranquilidad a la sociedad, que es la destinataria de cada propuesta y experiencia que llevamos adelante. Con (su autor) Hugo Peluzzo venimos trabajando desde hace muchos años con dos cuestiones. Con la obra y con formación docente. Nuestro sindicato, Agmer, tienen una escuela de formación pedagógica y sindical, donde llevamos adelante varias propuestas surgidas desde los docentes, porque tenemos la premisa donde consideramos que en nuestra provincia existen un montón de experiencias pedagógicas y miradas sobre políticas educativas, que es necesario compartir y ponerlo en consideración del conjunto. Qué mejor que los docentes para ponerlos y compartirlos solidariamente. En esta línea está la capacitación con títeres. No es la primera experiencia, trabajamos con problemáticas que surgen de la sociedad y se instalan en el sistema educativo como nuevas cuestiones, derechos, etc. A medida que la sociedad avanza surgen emergentes que la escuela los va incorporando. Agmer tienen una larga trayectoria en educación ambiental, este es uno de los ejes que trabaja la escuela de formación, pero también derechos humanos, género, violencia institucional y distintas áreas de aprendizaje. Esta escuela tiene diez años y Hugo forma parte de las primeras propuestas de formación. En este caso concreto en títeres tiene dos instancias. Una formación docentes y otra es compartir en los distintos territorios, departamento por departamento, y también una obra de títeres que abarca estas temáticas que son los nuevos emergentes. Lo ambiental  forma parte además de nuevos derechos de nueva generación, donde varias legislaciones internacionales y nacional lo van incorporando. En este escenario es que la obra que trabaja la cuestión ambiental, la fumigación de las escuelas, los agrotóxicos y demás, vienen circulando en distintos departamentos, donde casi hemos cubierto todos sin ningún problema. Es una propuesta que tiene que ver fuertemente con lo pedagógico y educativo. Les aconsejo que la miren, para que vean cómo trabaja un protocolo de (fumigación en las escuelas). Tenemos hoy un protocolo que tenemos que conocer y que se trabaje en las escuelas. El Consejo de Educación trabaja, está incorporado como eje transversal, y está en las propuestas curriculares en las escuelas la temática ambiental. Otro de los ejes es derechos humanos y educación sexual integral y violencia institucional. Insisto, son derechos de nueva generación y lógicamente es probable que genere en algún lado polémica, porque justamente así se construyen y consolidan los derechos”, afirmó.

 

Nuevamente sobre los reproches de la obra, Bernasconi afirmó que como trabajadores de la educación les “corresponde prestar atención y vemos con preocupación esta definición de ‘adoctrinamiento’ (que circuló sobre el episodio) que está absolutamente lejos y en las antípodas de nuestra búsqueda. El sistema educativo argentino y las políticas educativas que se han venido desarrollando podemos encontrar momentos medulares donde sí ha habido momento críticos donde ha habido tendencias al adoctrinamiento, pero estas tendencias se consolidan en contexto de gobiernos fuertemente autoritarios, concretamente en la dictadura militar.  Pero la sociedad ha hecho avances y estamos lejos de esta cuestión. No nos parece atinente esta definición y aporta una confusión general que recurre desde el sentido común donde se pretende instalar un análisis carente de significancia. Y como sociedad no necesitamos apresuramientos para tomar definiciones de ese tenor. Nuestro sindicato además que tiene un fuerte vínculo con la escuela y cada paso, cada acto que da, lo hace con conocimientos tanto del Consejo General de Educación, las Direcciones Departamentales, y por lo tanto la obra tampoco es que llega de prepo y nada por el estilo. Por su puesto para mejorar todo sistema de comunicación, somos los primeros en repesar nuestras prácticas, y si es necesario ser más claro, encontraremos la manera de llevarlo adelante”, insistió.

 

Finalmente, dejó apuntó que “respetuosos de la opinión de los papás, también somos absolutamente claros que nos ocupa los derechos de nuestros docentes y estamos atentos a que no se instales concepciones persecutorias y sancionatorias hacia ningún docente del departamento Uruguay y de la provincia. Invito nuevamente a que conozcan la obra”, insistió.

 

MALESTAR

Al trascender el enojo de los ingenieros agrónomos con la obra de títeres, su autor y marionetista, Hugo Peruzzo, se expresó a través de su perfil en redes sociales, donde planteó que “es una obra que intenta ser un granito de arena más contra la problemática de los agrotóxicos y las escuelas fumigadas e intenta ser un disparador para que podamos hablar de salud, de modelos económicos, de luchas ambientales de soberanía alimentaria, en definitiva de derechos humanos”, afirmó. “Como educador y artista creo profundamente en el teatro de títeres  como una herramienta de transformación social porque esa ha sido su riqueza desde tiempos inmemoriales,  en ese sentido esta obra es una comedia, una ficción que cuenta una tragedia”.

 

Peruzzo apuntó que “como todo hecho artístico muchas veces no trae respuestas sino preguntas y entre ellas: ¿Por qué la historia transcurre en una escuelita rural? su maestro y la particularidad de sus alumnxs una abeja y un murciélago, y a su vez también la del villano Sr Campito y el pillo mosquito Fumigador. La obra va más allá de una puesta en escena bien lograda sino que intenta crear nuevos sentidos, y una invitación a conocer las heroínas en la vida real, Ana Zabaloy su lucha y su legado, Estela Lemes y Mariela Leiva maestras rurales fumigadas de mi provincia, son un ejemplo de lucha y resistencia y como ellas muchas agrupaciones civiles, redes sociales, sindicatos  y proyectos políticos  que la pelean como pueden y desde donde pueden”.

 

El teatrero contó asimismo que 2012 viene trabajando con estas propuestas artísticas pedagógicas en formación docente, y disparó contra “el fenómeno de la ‘cancelación’”, que “es ‘censura’ y no es nuevo, pero es inadmisible que se de en el siglo XXI y más inadmisible aún que se haga en nombre de minorías que pueden sentirse afectadas. Por eso es de vital importancia seguir construyendo espacios, generando nuevos sentidos, pensando y actuando, diciendo y haciendo, desde mi lugar sigo caminando con mis títeres y ellos caminan conmigo en esa sensación de vida compartida que imagino no puede ser de otra manera porque esa ha sido la ética de todo titiritero y ellos los títeres pertenecen y viven en la memoria colectiva de los pueblos”, finalizó.

 

 

Foto: MDZ – El Día.

De la Redacción de ERA Verde