Giuseppe Mingolla, partícipe de proyectos autogestivos y en entidades ambientales de la región fue designado como coordinador general de la Red Protierra Argentina. Se trata de una organización enfocada en favorecer la construcción de hábitats saludables en base a la utilización responsable de los materiales.  En diálogo con ERA Verde, el Tano Mingolla planteó la idea de poder desarrollar la promoción de propuestas que permitan imaginar lugares donde vivir sea pensado como respuesta a las necesidades humanas de alcanzar condiciones “saludables, sostenibles e integradoras”.

 

Pinuccio, Giuseppe o el Tano a secas es un personaje que por las piruetas de su vida desembarcó en Paraná allá por el año 2005. Hay quienes los recuerdan de esos primeros años en las rondas de socios, peñistas y escuchas de la FM Radio Cualquiera, la emisora autogestiva que funcionó en al Centro Cultural La Hendija. El Tano pasó integrar el inventario de la radio primero como invitado, luego como colaborador y finalmente como columnista en el Juntapuchos, el mítico magazine matutino conducido por Federico Fumiato. De la mano que se tendían entre todos, Giuseppe integró esa notable experiencia donde desfilaban distintas voces que experimentaban el quehacer cooperativo e independiente y ahí se forjó tal vez en el argentino del Litoral, con indiscutible tonada italiana, que hoy conocemos como propio.

 

Ahora, vinculado estrechamente con la bioconstrucción, Mingolla se encuentra al frente de la coordinación de la Red Protierra Argentina. “Es una red de profesionales, docentes, investigadores universitarios y bioconstructores de todo el país, enfocados en la utilización de la tierra como materia prima para la construcción y su utilización responsable”, cuenta en charla con ERA Verde. “La red desarrolla sus actividades a través de seis comisiones: Difusión, Formación, Normativas, Materiales y Sistemas constructivos, Hábitat y Patrimonio. Cada comisión tiene sus coordinadores”, describió para trazar los ejes en los cuales es canalizan los desafíos de promover esta forma de concebir los hábitats humanos.

 

“En este primer semestre del 2020 estamos haciendo un relevamiento de todas las ordenanzas activas que permiten las construcciones de vivienda y espacios públicos que utilizan la tierra. En este aspecto, la comisión normativas está a disposición de todas las administraciones locales, provinciales y nacionales para asesorar y acompañar las eventuales ordenanzas y leyes que permiten el utilizo de la tierra para las edificaciones. La comisión de formación está ejecutando un protocolo de relevamiento de toda la oferta educativa, formativa o de capacitaciones activas. Esto nos ayuda a formular también las eventuales propuestas formativas desde la red. En esta tarea de relevamientos se encuentran también la comisión de hábitat y patrimonio que van desarrollando un mapa que identifique lo construido con tierra”, enumeró respecto a las tareas dispuestas por la organización.

 

Y en cuanto al rol de coordinador, Mingolla se planteó  principalmente “favorecer el trabajo armónico ente las comisiones y sobre todo lo de llevar la Red a dialogar con todas las instituciones de gobiernos, colegios profesionales, cámaras de sector y a través de la comisión de difusión poder concientizar a la ciudadanía respecto a la posibilidad de poder construir un hábitat saludable. En definitiva lo que me ha llevado a postularme para el bienio 2020-2021 es lo de promocionar el desarrollo de sistemas constructivos que relacionan de un modo armónico las aplicaciones tecnológicas, los aspectos funcionales y estéticos, y la vinculación con el entorno natural o urbano, para lograr hábitats que respondan a las necesidades humanas en condiciones saludables, sostenibles e integradoras”, afirmó.

 

Un perfil

 

Para dar a conocer este nombramiento, su trayectoria y rol, la Red Protierra Argentina difundió una entrevista, donde el Tano Mingolla aporta algunos datos que acerquen a conocerlo más.

 

–Giuseppe, ¿De dónde sós y dónde vivís actualmente?

– Nací en Italia, pero hace 15 años que me radiqué en Argentina, vivo en Paraná, provincia de Entre Ríos.

 

– ¿Y cuál es tu formación y ámbito laboral?

– Me formé en Italia como Técnico Geómetra y luego como restaurador de edificios antiguos, es decir bajo protección del Ministerio de Bienes Culturales del Estado Italiano.

Actualmente me ocupo y preocupo de las bioconstrucciones, a partir de un enfoque basado en la complejidad  de la construcción social, sustentable y sostenible de los hábitats.

Co-participo en proyectos y actividades a través de sinergias con la fundación Eco Urbano de la ciudad de Paraná, con la Universidad Tecnológica Nacional (UTN), con la Asociación Civil Gasetí Gazún de la ciudad de Rosario del Tala, Entre Ríos, y con la red de organizaciones sociales y comunitarias “Los cuidadores de la casa común” en la provincia de Entre Ríos.

 

– ¿Qué implica tu nuevo rol en la Red Protierra Argentina?

– Ser el coordinador general de la Red Protierra implica trabajar en equipo con los coordinadores de las cinco comisiones que están funcionando desde la reunión de Humahuaca (Jujuy, donde fue elegido en diciembre de 2019).

 

– ¿Cómo se organizan para trabajar?

– Hacemos reuniones mensuales en formato virtual para ver el avance de los objetivos propuestos por cada comisión, saber en qué se está trabajando, compartir logros y dificultades y entre todxs buscarle la vuelta. Cuando hace falta nos comunicamos por video llamada o por grupo de Whatsapp.

 

– ¿Cuál es tu visión como bioconstructor y como coordinador de esta red?

–Mi intención es analizar y promover modelos de hábitats que respondan a las necesidades humanas en condiciones saludables, sostenibles e integradoras. En este sentido, asumo que se deben impulsar procesos orientados a la reflexión crítica desde una mirada latinoamericana, que cuestionen la racionalidad económica y homogeneizadora dominante, que posibiliten a las diversas comunidades legitimar sus saberes, ponerlos en común, producir, auto gestionar y decidir autónomamente.

Hay cuestiones fundamentales que la racionalidad instrumental no tiene en cuenta cuando habla del desarrollo sustentable; y esas cuestiones no contempladas son las que quisiera promover. Para la construcción de la sustentabilidad tal como la entiendo, y a la que apunta mi accionar, se plantea la necesidad de una nueva ética del desarrollo.

 

–¿Qué frase inspiradora podrías elegir para compartir?

– Sí una frase de Paulo Freire: «Los hombres se humanizan, trabajando juntos para hacer del mundo, cada vez más, la mediación de conciencias que cobran existencia común en libertad. A los que construyen juntos el mundo humano compete asumir la responsabilidad de darle dirección. Decir su palabra equivale a asumir conscientemente, como trabajador, la función de sujeto de su historia, en colaboración con los demás trabajadores: el pueblo»

 

De la Redacción de ERA Verde