Este año la Municipalidad de Paraná colocarán 50 ovitrampas en diferentes puntos de la ciudad. Además, anunció que extenderá el programa a escuela, para involucrar a la comunidad educativa.
La secretaria de Salud municipal, Claudia Enrique, se reunió con autoridades de la Subsecretaría de Ambiente de la Municipalidad. En la jornada “resolvió pasar de 25 a 50 ovitrampas y se establecieron los puntos donde se colocarán”, contó Enrique sobre el sistema de vigilancia del aedes aegypti, el culícido transmisor de dengue, zika y chikungunya, entre otras enfermedades.
La funcionaria dijo que “se duplicará la cantidad de ovitrmapas”, así como también “se incorporarán tres escuelas, donde se dará un dispositivo a un alumno por semana para que puedan comprender la importancia de la prevención del dengue y hagan una actividad científica, que los interpele para poder trabajar en el aula”.
DISPOSTIVO
Las ovitrampas son trampas que se usa para el monitoreo y control del mosquito aedes aegypti, transmisor de dengue, zika y chikungunya, y se implementan en Paraná para reducir los casos de dengue gracias a la detección de presencia de huevos de mosquito en zonas específicas, lo que permite al municipio realizar descacharrización y campañas preventivas de forma focalizada.
En ese sentido, apuntó que hay una definición política de la intendenta Rosario Romero “de cuidar la salud de los vecinos, por lo que desde julio se realizan campañas de descacharrización y concientización sobre el dengue y las formas de prevenirlo”.
Para prevenir el dengue es fundamental eliminar los criaderos de mosquitos y protegerse de las picaduras. Esto se logra limpiando y dando vuelta recipientes con agua en casa (macetas, bebederos, baldes), tapando tanques de agua y eliminando objetos que puedan acumular agua. Además, hay que usar repelente, ropa clara y larga, y colocar mosquiteros en puertas y ventanas para evitar picaduras.
