Nuevos desmontes ilegales en áreas protegidas de la selva de Montiel

Lugareños rurales del norte del departamento Federal denunciaron nuevamente talas indiscriminadas de monte nativo ubicado en una estancia que se encuentra comprendida dentro de la reserva provincial de usos múltiples “El Gato” y “Loma Limpia”. En 2006 esta zona fue declarada por ley de interés para el amparo de su ecosistema, pero sobre la misma nunca se implementó una reglamentación o medida para su salvaguarda efectiva. En 2021 hubo un proyecto de integrar el área a un parque nacional, pero la iniciativa naufragó. En abril de 2024 organizaciones en territorio denunciaron el desmonte y quema de 300 hectáreas protegidas de la estancia “San Juan del Puerto”, sobre el límite con la estancia “Santa Rosa”. Ahora, se arrasó una superficie no determinada en el establecimiento “Don Mario”, anteriormente conocido como “La Yapa”, señaló el grupo “Descubriendo Federal”. Extraoficialmente se informó a ERA Verde que a la Coordinación de Bosques Nativos de Entre Ríos ingresó una denuncia pero que la misma no prosperó en una investigación debida.

En las últimas semanas se denunció un nuevo desmonte en el “camino de Los Portones”, en la estancia “La Yapa”, al norte del departamento Federal. La información fue dada a conocer por las organizaciones “Defendamos Nuestro Montiel” y “Descubriendo Federal” a través de publicaciones en redes digitales. La advertencia apunta que estos desmontes ilegales se producen dentro de un espacio comprendido por la Reserva provincial de Usos Múltiples (RUM) “El Gato” y “Loma Limpia”, creada por la Ley Nº 9.706 del año 2006. Se trata de un total de 110.000 hectáreas que pertenece a distintos titulares privados que se ven comprometidos llevar adelante prácticas sustentables. Pero en rigor, la normativo nunca fue implementada y carece de un plan de manejo, por lo que en los hechos resulta letra muerta, señalaron fuentes especializadas en la temática a ERA Verde. Igualmente, el carácter y estatus de estas tierras hace se encuentren bajo resguardo legal y este tipo de acciones están prohibidas.

De acuerdo a lo que señaló “Descubriendo Federal”, los desmontes se realizaron en el “establecimiento Don Mario –anteriormente llamado ‘La Yapa’–“, propiedad de “los empresarios (hermanos) Plem (Agro), quienes se dedican al silage y picado” de forraje, precisaron. Los hechos fueron registrados a mitad de mes “y el día 22 de julio al enterarse de todo el movimiento que se estaba realizando en las redes fueron al establecimiento y se llevaron las maquinarias para evitar el secuestro”, se reveló.

Queman y desmontan el campo donde iban a crear el Parque Nacional Selva de Montiel

BOSQUES SIN PROTECCIÓN

Están “destruyendo el bosque natural y las palmeras”, señalaron en comunicación con ERA Verde. “Esta actividad descontrolada está causando importantes daños ambientales. La comunidad local está profundamente preocupada”, expresaron desde la organización. “Es necesario que esto se difunda ya que ninguna autoridad hace nada”, lamentaron ya que “aún no he recibido ninguna intervención de las autoridades locales ni nacionales”.

“Defendamos Nuestro Montiel” también manifestó su repudio a los desmontes que “continúan”. Resaltaron que “lo más grave es que se dan dentro de áreas naturales protegidas como lo es la Reserva de Usos múltiples El Gato y Loma Limpia que, si bien esta carece de implementación, las autoridades elijen tirarse la pelota en vez de asumir el desafío de conservar efectivamente esta porción de espinal con un alto valor de conservación”, reprocharon.

Las talas ilegales en estancia La Yapa, recordaron, “se suman a los ya realizados en la estancia San Juan del Puerto, donde se proyectaba la creación de un Parque Nacional de ‘categoría máxima de conservación en Argentina’ pero que, por malos manejos políticos, no llego a concretarse aún” resaltaron. Agregaron como agravante que la pérdida de bosque nativo se da “en un contexto de habilitaciones de caza de especies autóctonas sin saber cómo se encuentran sus poblaciones, desmontes sin control y falta de autoridades comprometidas en áreas sensibles. El futuro de los recursos naturales de nuestra provincia sigue a la deriva. La presión social y visibilizar lo que pasa es la herramienta más fuerte que hoy tenemos”, entendieron para dar a conocer la situación.