Pobladores de calle Racedo, entre avenida Ramírez y de Las Américas de Paraná, se autoconvocaron en una asamblea en defensa de la arboleda que se encuentra sobre esa arteria vial. Lo hicieron ante el avance de obras de ensanche de calle anunciado por la Municipalidad y cuyo inicio les fue anunciado de un día para otro, contaron a ERA Verde. Los vecinos plantearon que los trabajos propuestos fueron inconsultos, que no son prioritarios y que el corte de 150 añosos árboles atentan contra la salud, a contramano de la tendencia mundial de incorporar pulmones verdes a las ciudades. Tienen un plan alternativo que quieren charlar con las autoridades.  

Este viernes por la mañana cuando la empresa contratista de las obras de ensanche de calle Racedo en el tramo que va de avenida Ramírez a Las Américas de Paraná se aprestaba a instalar el obrador de trabajo se vieron sorprendidos por un grupo de vecinos que se plantaron para impedir el inicio de las labores. Un grupo de autoconvocados se puso firme para frenar el avance de un proyecto que ven perjudicial para la vida en el barrio. La ampliación de la calzada implicaría la tala de centenares de árboles muchos y esto ya se observa como de alto impacto para la salud y para el ambiente. Además piden que se exhiba el informe de impacto ambiental sobre el cual hasta ahora no han podido tener acceso.  

Los trabajos para la reformulación de este tramo de calle Racedo se conocieron a principios de diciembre pasado. Y el inicio del proyecto los vecinos se enteraron un día antes por el presidente de la vecinal Sáenz Peña a la que pertenece esa jurisdicción. “De la obras nos enteramos unos días antes a través de los medios. Porque nunca desde la Comisión Vecinal pasaron por casa de los vecinos a preguntarnos y a contarnos sobre la obra. Esto es lo primero que vemos como un atropello a nuestro derecho, a nuestra libertad, porque somos (los vecinos) los primeros damnificados directamente, porque vivimos acá, conocemos el barrio y de las necesidades que tiene. De hecho ya hemos presentado notas al municipio hace dos años atrás, sobre la que no hemos tenido respuestas, por el gran problema que tiene el barrio de las cloacas. Las cloacas tienen 60 años, se rebasan cada dos por tres y tenemos criaturas que se enferman de gastroenteritis y han requerido internación reiterada hasta con cuadros de gravedad”, contó a ERA Verde Silvina Grubert sobre cómo entienden la situación.

  Es así como la vecina explicó que al darse la noticia rápidamente se autoconvocaron. “Esto nos llevó a movilizarnos de forma activa y permanente”, dijo y montaron guardia para impedir la instalación de la empresa constructora.  

Los pobladores apuntan a lo intempestivo e inconsulto de los trabajos, pero también a que deteriora uno de los principales valores del barrio. “Somos vecinos de toda la vida, de más de 70 años, nuestra madre nació acá, sabemos lo que es y que lo más lindo justamente son las veredas y los verdes, que es un pulmón de la ciudad este verde que tiene calle Racedo. Y no es necesario ni prioritario en este momento semejante obra y gasto, viviendo en una época de Pandemia de una enfermedad de vías respiratorias”, situó Grubert, quien agregó: “Quieren hacer una obra en pleno enero que van a sacar todos los verdes, que implica que aumente la temperatura en 7º para quienes vivimos acá, osea que nos vamos a incinerar, y sin árboles que limpian el ambiente”, afirmó.  

La vecina reflexionó además que el proyecto de obra de ensanche de Racedo data de 1960 y desde entonces han cambiado muchos conceptos. “En todo el mundo están ampliando veredas y sembrando árboles, porque se dieron cuenta del error que fue el cemento, y acá queremos hacer al revés. Entonces los vecinos no estamos en contra de las obras públicas, es más, queremos que nos arreglen las luminarias, las cloacas, el agua, las calles llenas de pozos, hay una propuesta de doble mano sin ensanche. Queremos hablar sobre esto. Y las plata que sobre de esta obras destinarlas a prioritarias en otros barrios, aquellos que no tienen cloacas, bien el agua potable que se le vive cortando. No queremos que la empresa salga perjudicada o el municipio. Que se reestructure y se redireccionen los fondos”, apuntó como alternativa.  

La firma adjudicataria es Paulina Castro de Demartín e Hijos SRL y las tareas prevista en un lapso de 6 meses tiene un presupuesto de $ 72.982.239,47.  

 

Recalculando   

 

“Primero y principal no vamos a permitir el inicio de la obra y tomaremos las medidas necesarias, porque es una avasallamiento del vecino, un ecocidio con graves impactos ambientales y de salud”, remarcó Diego Grubert a ERA Verde. “Lo que queremos es que el municipio frene indefinidamente la obra y reestructurar el presupuesto por medio de ordenanza como ya lo ha hecho en otras ocasiones. Por ejemplo con el Observatorio que iba a hacer en el Parque Nuevo; redireccionaron el presupuesto a algo de mayor necesidad. Justamente eso es lo que queremos”, propuso. Pero además, lo que pretenden los vecinos es “sentarnos con la Municipalidad a elaborar un proyecto entre municipio, vecinos, entidades de salud y medio ambiente, para realizar algo que nos permita conservar lo bueno y modificar lo que se pueda sin tocar los espacios verdes”, concedió.  

La reunión con las autoridades municipales, se adelantó, se haría este lunes, luego de iniciar un diálogo con el secretario de Obras Públicas, Maximiliano Argento, que se presentó en el conflicto suscitado al impedirse el inicio de los trabajos de reforma.   Silvina Grubert recordó que en “reiteradas veces hemos pedido al presidente de la vecinal que se comunique con el intendente, con las autoridades salud, medio ambiente, obras públicas, para ver de qué manera podemos dialogar, conversar y ver de qué manera se puede reestructurar esta obra porque el ensanche no lo queremos bajo ningún punto de vista y además porque hay cosas mucho más prioritarias en qué gastar la plata que en esto que no va a beneficiar nada. Y en cuanto a salud va a ser perjudicial. Siendo que es un gobierno municipal en la misma línea del Presidente, que desde que empezó la Pandemia ha resaltado que lo que él prioriza es la salud. Esta obra es todo lo contrario”, afirmó.   “Insistimos: no vamos a permitir el inicio de obra, de esta obra, hasta que se revea el contrato, y se formule algo que no sea nocivo”, dijo Diego Grubert, quien reafirmó que es un “ecocidio lo que quieren hacer con árboles de 70 años; es una barbaridad.  

 

Foto: captura Google Street View

 De la Redacción de ERA Verde