El fiscal de Estado entrerriano, Julio Rodríguez Signes, participó este miércoles en Buenos Aires de la primera reunión de la Mesa de Diálogo Interdisciplinaria para el Desarrollo Fluvial de la Vía Navegable Troncal, en proceso hacia una nueva licitación de la Hidrovía Paraná-Paraguay. El encuentro tuvo lugar en el Palacio Libertad (antes Centro Cultural Kirchner –CCK–) y convocó a  más de 60 representantes del sector público y privado, donde expusieron sobre variables como plazos y las mejores estrategias de intervención en la vía navegable.

 

Rodríguez Signes evaluó como «muy positiva» y con gran participación de las provincias ribereñas la convocatoria. «Esta es la primera reunión de una serie de reuniones ya que el proceso licitatorio, estimo, llevará todo el año. Pudimos plantear en términos generales nuestras propuestas y el subsecretario de la Agencia Nacional de Puertos, Iñaki Arreseygor, nos pidió que ya incorporemos documentos técnicos, cosa que Entre Ríos va hacer «, adelantó el fiscal.

Tras el encuentro Rodríguez Signes manifestó en declaraciones de prensa sobre los aspectos que interesan a Entre Ríos: «Argentina necesita de un sistema logístico eficiente, integral y en particular, la región litoral de un sistema que la integre al comercio exterior. Entre Ríos en ese esquema se postula como plataforma logística regional, porque hay una infraestructura logística existente, tanto ferroviaria como vial y fluvial que sería convergente en el sur de nuestra provincia, a la altura de los ríos Paraná Guazú y Paraná Bravo, con desembocadura con el canal Martin García. Nosotros decimos que, a la altura de la bifurcación, kilómetro 231 del Paraná, la hidrovía tiene que ser de doble vía, valga la redundancia”, planteó.

 

“Por un lado –siguió el funcionario provincial–, el Paraná de las Palmas ensamblando con el canal Emilio Mitre, salida al Río de la Plata. Pero, por otra, el Paraná Guazú, el Paraná Bravo, el canal Martin García, por donde transcurre el 77 por ciento del agua del Paraná, solamente el 23 por ciento va por el Paraná de las Palmas, lo que nos permite hablar de una hidrovía de doble vía mucho más funcional y con poco esfuerzo de dragado, porque este sistema del Paraná Guazú Bravo es un sistema que requiere poco dragado de apertura y poco dragado de mantenimiento para llevarlo a 34 pies, que es lo que inicialmente estamos pidiendo y ponerlo en línea con el canal Martin García que tiene 34 pies», explicó.

 

Esta postura que detalló Rodríguez Signes tiene que ver con los puntos que se abordaron en la jornada:

– Las tareas de mantenimiento y profundización del canal.

– Las condiciones de seguridad operativa.

– La incorporación de tecnificación y monitoreo en tiempo real.

– Los plazos y estrategias de intervención.

– Las variables regulatorias y contractuales que deberá contemplar el nuevo pliego.

 

Se presentó, además, una agenda temática a trabajar en futuras mesas técnicas -de carácter federal e interdisciplinario- y se anunció que estas se llevarán a cabo en provincias litoraleñas.