El Gobierno provincial dio a conocer sanciones por el vertido contaminante de despojos originados por la faena de pollos de la empresa procesadora Soychú de Gualeguay. Fluidos de sangre eran arrojados sin tratamiento en un afluente del arroyo El Espinillo por la empresa Wolf Hormigones en jurisdicción de la ciudad de Crespo, confirmaron oficialmente a ERA Verde. Las autoridades ordenaron el cese de la actividad ilegal y un sumario para determinar posibles sanciones. La firma adelantó una compensación por los daños ocasionados con la donación de árboles. No se descarta tampoco castigos al frigorífico donde se originan los restos orgánicos.

 

La Secretaría de Ambiente de Entre Ríos dispuso el cese de actividades de la empresa Wolf Hormigones por transporte y vuelco de efluentes industriales sin autorización de la firma frigorífica Soychú que se encuentra en la ciudad de Gualeguay. De este modo se dispuso el cese de actividades de la firma dedicada a la elaboración de hormigón elaborado que cuenta con una planta en el Parque Industrial de Crespo. La hormigonera prestaba servicios de traslado sin autorización de efluentes industriales para luego volcarlos en un curso de agua que deriva en el arroyo El Espinillo, cuya contaminación fue alertada el pasado 17 de noviembre. “Apenas recibida la denuncia, personal de la Secretaría de Ambiente procedió a realizar la inspección correspondiente”, se indicó en un parte de prensa gubernamental.

 

Además de tomar muestras en el curso de agua impactado por el vertido de fluidos sanguíneos de origen aviar en Crespo, “también se inspeccionó a la empresa Soychú porque, al momento de disponerse el cese de Wolf Hormigones, sus propietarios informaron que los líquidos cloacales provenían de Soychú. También habrá sanciones para Soychú”, se anticipó a ERA Verde desde Ambiente provincial.

 

“Por el momento Wolf Hormigones tiene permiso para operar la parte de servicios atmosféricos para lo cual tiene habilitación. No así lo de efluentes”, se aclaró.

 

En la inspección se tomar muestras del curso de agua en el sector contiguo al tejido perimetral de la hormigonera y seguidamente se constató la existencia de una cámara de inspección, situada frente al parque industrial, descubierta y con flujo continuo del pestilente efluente. Además, contaba con sistema de lagunas contiguo pero que no presentaba ingreso de líquidos y denotaba tiempo sin operación. Pero sobre el lateral oeste de este sistema se constató la presencia, sobre suelo natural, de residuos semisólidos los que se corresponderían a los procedentes de una industria frigorífica avícola, se detalló desde el organismo oficial.

 

Luego de este registro, se constató que en la cabecera del curso de agua, en el sector próximo al acceso a la ciudad de Crespo, se descargaba de efluente cloacal hacia el curso de agua a través de rotura en cámara de inspección. Posteriormente se constató aguas abajo del mismo curso de agua, dentro del predio del sistema de tratamiento de efluentes cloacales que está fuera de operación perteneciente al municipio de Crespo, la presencia de dos camiones atmosféricos cargados con sangre de aves procedentes de un frigorífico avícola Soychú de Gualeguay. “La intención era descargar su contenido líquido sobre el cauce del curso mencionado”, se precisó.

Estudian sanción para frigorífico que volcó efluentes en el arroyo El Espinillo

POLIRUBRO

 

Ante las pruebas recabadas y los resultados de las pericias se solicitó la inmediata suspensión del proceso de descarga y el cese preventivo de actividades el cual se encuentra especificado en el acta correspondiente que se labró.

 

Luego del cese de esta actividad contaminante, la Secretaría de Ambiente convocó a la empresa Wolf Hormigones la que asumió el compromiso de compensación  ambiental, “sin perjuicio de las sanciones que por sumario corresponda, con donación de árboles”, se comentó a ERA Verde. “También se dio intervención a la Fiscalía Federal de Paraná”, se agregó.

 

Conocido el episodio, el integrante de del Foro Ambiental Gualeguay, Ramón Velázquez, comentó a este sitio que “no extraña para nada” y que el traslado de restos orgánicos del frigorífico y su posterior descarte sin control ni tratamiento en distintos  puntos de la provincia son usuales de acuerdo a las denuncias que les han hecho llegar. Se mencionó que la sangre y fluidos similares producidos por la faena de aves no tienen uso productivo y su destino final es un problema. En este orden se indicó que testimonios dan cuenta que se los “entierra” a campos alquilados, se los deposita en napas subterráneas. “Esto vienen sucediendo desde hace tiempo”, lamentó Velázquez, quien recordó

 

También recordó que cuando la empresa se incendió el 19 de noviembre de2021, producto del siniestro se generaron residuos tóxicos de los cuales nunca se supo cómo fueron tratados.

 

Preguntan por los residuos tóxicos tras el incendio de Soychú

 

 

 

De la Redacción de ERA Verde