Desde la Secretaría de Ambiente de Entre Ríos se recordó que todas las playas y los balnearios de Entre Ríos, tanto públicas como privadas, deben cumplir con la normativa de monitoreo de las aguas de usos recreativos. Se aclaró que la habilitación de los balnearios es competencia de comunas y municipios, aunque por la legislación vigente la Provincia tiene el poder de control de las aguas. De acuerdo a lo que se informó a ERA Verde, según establece la regulación vigente se han recibido informes bioquímicos de algunos municipios, pero de otros se aguarda todavía que completen la documentación.
Ambiente de la provincia señaló que se encuentra en vigencia la normativa para el uso de balnearios y playas en las costas entrerrianas. En este orden se refirió a la resolución Nº 084/2007 que establece medidas obligatorias para garantizar la seguridad y calidad del agua recreativa durante la temporada de baño. Esto es realizar un análisis de agua cada seis días en el período comprendido entre el 1 de noviembre y el 31 de marzo de cada año, se indicó oficialmente. Este requerimiento, se remarcó, fue recordado a fines de 2024 en vistas a lo que era la apertura de la temporada estival 24/25.
“Si bien la potestad para la habilitación o no de las playas y los balnearios recae en los gobiernos locales (tanto municipios como comunas); desde octubre pasado se ha venido instrumentando una acción de monitoreo a la misma”, se indicó en un parte de prensa gubernamental.
Las playas del río Uruguay se tiñen de verde por la agresiva invasión de cianobacterias
El seguimiento de los parámetros microbiológicos para definir la calidad de agua para uso recreativo no seguida a rajatabla por los municipios que cuentan con playas. Desde Ambiente trascendió a ERA Verde que han recibieron “de algunos municipios” los informes al os que están obligados. En el caso de los que se encuentran con demoras, se les ha requerido por nota, al tiempo que se puso a disposición el laboratorio oficial que se encuentra en Concepción del Uruguay para el caso de las Municipalidades que no cuente con el suyo propio o contraten a un privado. Ante la presencia de algas o cianobacterias, se ha establecido como premisa que las comunas deben “priorizar la salud”, se recalcó. También se especificó que, en el caso de la costa del río Uruguay, se encuentran competencias definidas de tres escalas. En las aguas del curso compartido con la República Oriental del Uruguay rige la Comisión Administradora del Río Uruguay (CARU), en donde tiene jurisdicción para el monitoreo en 500 kilómetros de extensión. La Provincia tiene el poder de policía que le da le Ley de Aguas y las municipalidades en la costa de su ejido, por lo cual la habilitación de los balnearios recae en los gobiernos locales.
RECOMENDACIONES
«Se recomienda a los bañistas evitar el ingreso al agua si detectan elementos extraños, como floraciones algales (verdín), independientemente de otras acciones preventivas que las autoridades locales puedan tomar», apuntó el director General Legal y de Gestión Ambiental del Agua, Osvaldo Fernández.
Entre las disposiciones de la normativa, se exige la implementación de un plan de vigilancia que incluye análisis periódicos de la calidad del agua. Los resultados de estos análisis deben ser informados a la Secretaría de Ambiente, en su calidad de autoridad de aplicación de la Ley de Aguas.
“En caso de detectarse riesgos para la salud de los bañistas o animales, los gobiernos locales son quienes deben tomar medidas preventivas inmediatas, como la inhabilitación temporal de las playas afectadas”, se subrayó.
Se especificó que la responsabilidad de garantizar el cumplimiento de estas medidas recae en los municipios, comunas y también propietarios de playas privadas, quienes también deben informar a la población sobre posibles riesgos. La Secretaría de Ambiente supervisa el cumplimiento de estas obligaciones y está facultada para intervenir en caso de inacción por parte de las autoridades con responsabilidad directa en la materia, se apuntó finalmente.
Fotos: Juan Menoni.
De la Redacción de ERA Verde