“Las boletas de la ATER (Administradora Tributaria de Entre Ríos) no van a llegar más en papel a tu casa”, adelantó el gobernador, Rogelio Frigerio, al comunicar la eliminación de este sistema de notificación de los impuestos provinciales. La modalidad permitirá ahorrar en tinta, papel y distribución que se destinará a educación, salud y educación, señalo el mandatario en sus redes digitales. Se calcula que dejar de imprimir y repartir boletas en formato físico ahorrará 5.000 millones de pesos anuales.

 

La decisión, se comentó, forma parte de una política de digitalización que busca avanzar hacia una administración pública sin papel y con mayor eficiencia.

 

«Imprimir y repartir boletas nos costaba 5.000 millones de pesos al año. Una locura», expresó el mandatario a través de sus redes sociales, donde también explicó que el dinero que antes se destinaba a ese gasto podrá utilizarse para fortalecer áreas clave del Estado.

 

«Desde hoy, eso se termina. Vamos hacia el papel cero en la administración pública», sostuvo Frigerio, y remarcó que se trata de «un cambio de hábito necesario para el siglo XXI, y una decisión que nos permite destinar esa plata a nuestras prioridades: salud, educación, seguridad e infraestructura».

 

La iniciativa se enmarca en el plan de modernización del Estado provincial, con el objetivo de optimizar recursos, reducir el impacto ambiental y mejorar la calidad de los servicios que se brindan a los ciudadanos.

 

Desde el gobierno destacaron que la digitalización no solo implica un ahorro significativo, sino que también representa un paso hacia una gestión más ágil, transparente y sustentable.